Archivos Mensuales: octubre 2023

Santo Tomás de Villanueva.

El 10 de octubre celebramos la solemnidad de santo Tomás de Villanueva, patrono de la diócesis de Ciudad Real.

Por este motivo, tendrá lugar una procesión con la imagen del santo por las calles aledañas a la catedral. A continuación, el obispo presidirá la eucaristía, a la que están invitados todos los fieles que deseen asistir y los sacerdotes y religiosos de la diócesis.

Actos

11:00 h.: Salida de la procesión con la imagen del santo de la catedral, por la puerta del Prado. Recorrido: Prado, calle Prado, calle Azucena, calle Reyes, paseo del Prado, calle Prado.

Al término de la procesión comenzará la eucaristía.

Santo Tomás de Villanueva. Breve reseña biográfica

Santo Tomás de Villanueva está profundamente unido a nuestra diócesis de Ciudad Real. Su figura y obra se sitúa en el corazón del siglo de Oro español, siglo XVI, una época de auge que corresponde a su apogeo imperial y artístico, siendo el momento poético y creativo más importante de nuestra historia.

Nació a finales del año 1486 en Fuenllana, pueblecito del Partido y Vicaría de Montiel, en la casa de su abuelo materno, García Castellanos, y de su propia madre, Doña Lucia Martínez Castellanos. Su nacimiento se produjo allí debido a que en la villa donde vivían sus padres, Villanueva de los Infantes, se había declarado una epidemia de peste y decidieron que el pueblo de su madre era un lugar más seguro para el alumbramiento (en la habitación donde hoy se conserva la Capilla del Santo dentro del Convento de Agustinos); poco tiempo después regresó a Villanueva de los Infantes, en la que transcurrió su infancia, creció y fue educado. Hijo primogénito de Alonso Tomás García y Lucía Martínez Castellanos que tuvieron seis hijos. Fue bautizado en la Iglesia de Santa Catalina.

De familia económicamente desahogada sus padres eran propietarios de una finca muy próspera; (Según Quevedo de “los hijosdalgo más principales de Villanueva de los Infantes y deudo y pariente de las más nobles familias  de aquella tierra” algunos de las órdenes Militares de Calatrava, Santiago y San Juan enclavadas en la Mancha desde la Edad Media.

Vivió en Villanueva (de donde recibirá el “nombre”), en la que sigue en pie, parte de la casa original, con un escudo de armas en la esquina, al lado de un oratorio de la familia. Hizo sus primeros estudios en un convento que fundado por los franciscanos en 1483, donde pudo consolidar su amor a los pobres aprendido de los padres verdaderos maestros de vida y fe, sobre todo de su madre que le impulsó el ejercicio de la caridad, además su madre fundó una capilla para enterrar a su familia. De ahí que desde muy niño, tuviera esas actitudes caritativas y de amor a los pobres…cuando aún era un muchacho, a menudo llegaba desnudo a su casa porque había dado su ropa a los pobres.

Posteriormente Quevedo[1] cuando escribió la biografía del santo del que era gran devoto por conocer bien el pueblo, ya que está muy cerca de La Torre de Juan Abad, donde poseía algunas propiedades (señorío), asegura con visión providencialista que nació haciendo el bien, pues ese mismo día recobró el pueblo y el partido la salud con que el Señor los castigaba.

En 1501 con quince o dieciséis años, fue enviado a estudiar a la Universidad de Alcalá de Henares, centro universitario que nació en el contexto de la reforma de la vida eclesial y religiosa promovida por los Reyes Católicos y llevado a cabo bajo la dirección del Cardenal Cisneros. Allí obtiene el título de bachillerato en Artes y poco después el Magisterio en Artes. Pronto fue admirado por sus extraordinarias dotes como profesor. A pesar de ello decidió unirse a los frailes agustinos en Salamanca en 1516, y en 1518 fue ordenado sacerdote, celebrando su primera misa el día de Navidad (Nuestra Señora del Parto); a partir del año siguiente comenzó su vida pública de servicio a la Iglesia y a la Orden de San Agustín.

Dentro de la Orden, Santo Tomás de Villanueva ocupó sucesivamente los cargos de prior de su monasterio local, Visitador General, y Prior Provincial de Andalucía y Castilla. También fue profesor en la universidad y consejero y confesor del emperador Carlos V de España.

Posteriormente realizó estudios de Teología aunque nunca llegó a alcanzar grado en esta disciplina. Luego ingresó a la Universidad de Salamanca, solicitó y obtuvo su ingreso en el monasterio de San Agustín. A punto ya de cumplir los 30 años, en 1516, recibió el hábito agustiniano, y terminado el año de noviciado, emitió la profesión el 25 de noviembre de 1517. El 18 de diciembre, cuando acababa de cumplir 32 años, recibió la ordenación sacerdotal. Gozó de un gran prestigio tanto intelectual como espiritual y ocupó cargos de alta responsabilidad en la Orden Agustiniana.

Renunciando al gran patrimonio que su padre le dejó al morir, destinó su herencia como limosna para los pobres, para los cuales fundó un hospital. 

Tuvo una formación académica en Alcalá

Santo Tomás de Villanueva era bien conocido por su gran austeridad personal (vendió el colchón de paja en la que dormía con el fin de dar dinero a los pobres) y por sus esfuerzos caritativos continuos e incansables, sobre todo hacia los huérfanos, las mujeres pobres y con los enfermos. Además, poseía un concepto inteligente de La caridad, de modo que mientras él era muy caritativo, trató de obtener soluciones definitivas y estructurales al problema de la pobreza; por ejemplo, dando trabajo a los pobres, haciendo fructificar sus limosnas. “La caridad no sólo es dar, sino sacar de la necesidad al que la padece y librarla de ella cuando fuere posible»

En 1533, Tomás envió los primeros frailes agustinos quienes llegaron a México. Comenzó a experimentar éxtasis místicos durante la Santa Misa y al leer los salmos. Carlos V le ofreció el cargo de arzobispo de Granada, pero no lo aceptó debido a la gran humildad que poseía.

Carlos V, el 26 de junio de 1544, le presenta como arzobispo de Valencia. Santo Tomás, agradeciendo la deferencia y el nombramiento, pidió tiempo para reflexionar antes de aceptar, advirtiendo que nunca aceptaría el episcopado sin un mandato expreso de su Provincial, requisito este que fue muy pronto cumplido: el 2 de agosto del mismo año. Allí, ayudado por su obispo auxiliar, Juan Segriá, puso el orden en una arquidiócesis que durante un siglo no había tenido gobierno pastoral.

Santo Tomás de Villanueva vivió una de las épocas más agitadas y fructíferas de la historia, con todos los avatares de una Iglesia de reforma profunda, ansiosa de una espiritualidad y con muchos problemas en todos los campos: filosóficos, teológicos y pastorales. Entre las circunstancias históricas que motivaron los grandes empeños que santo Tomás de Villanueva tuvo durante su vida, fue la situación cultural y social de España en los tiempos en los que vivió. La España de santo Tomás de Villanueva fue una España de una importancia y vitalidad extraordinaria en el arte, la literatura, el pensamiento; en grandes escritores, grandes filósofos, teólogos, pintores y músicos, hablándose de España en el mundo entero, precisamente por el auge que iba adquiriendo nuestra nación tanto en lo militar como en lo diplomático, en lo cultural y en lo artístico.

Santo Tomás de Villanueva compuso hermosos sermones, entre los que se destaca el Sermón del Amor de Dios, uno de los grandes ejemplos de oratoria sagrada del siglo 16. Gozó de gran fama como predicador, con un estilo simple y sobrio. Carlos V, al oírle en una de sus prédicas, exclamó: «Este monseñor puede mover incluso las piedras!». Tomás provocó muchas conversiones públicas, y aun hoy día conmueven profundamente a quienes los leen. Tomás es el autor de varios Tratados, entre los que se incluye el Soliloquio entre Dios y el alma, sobre el tema de la comunión. Francisco de Quevedo escribió su biografía. Sus obras completas fueron publicadas en seis volúmenes como Opera omnia, en Manila en 1881. También tuvo una gran devoción a la Virgen María, cuyo corazón los comparó con la zarza ardiente de Moisés que no se consumía.

Santo Tomas murió en 1555 tras breve enfermedad, a la edad de 67 años. Su cuerpo, enterrado en la iglesia agustiniana del Socorro, fue trasladado a la catedral de Valencia en 1658. Fue canonizado por el Papa Alejandro VII el 1 de noviembre de 1658.

La Diócesis de Ciudad Real celebra, con solemnidad, el día 10 de octubre la festividad de su patrón Santo Tomás de Villanueva con una procesión, y posterior eucaristía, en la que participan sacerdotes, seminaristas y fieles y es presidida por el obispo.

Es el patrono de la Universidad de Villanueva, cerca de Filadelfia en los Estados Unidos, que fue fundada y es administrada por los frailes de su Orden, la Universidad Católica de Santo Tomás de Villanueva en La Habana, Cuba, la Universidad de Santo Tomás en Miami Gardens, Florida, EE.UU. y el Colegio Villanueva, una escuela católica para los niños ubicados en Brisbane, Australia.

Santo Tomás de Villanueva está en proceso para ser doctor de la Iglesia.

[1] Op. Cit. Francisco Javier Campos y Fernández de Sevilla, OSA http://dbe.rah.es/biografias/8759/santo-tomas-de-villanueva

Fuente:

Las vidrieras de la capilla del santísimo dedicadas a Santo Tomás de Villanueva en la catedral de Ciudad Real (El hallazgo de sus cartones originales)